Esta maravillosa propiedad cuenta con un glorioso ambiente natural, con amplias vistas del campo desde su privilegiada posición. Es muy privado, con fácil acceso. El terreno abancalado que lo rodea es una combinación de la naturaleza ibicenca y la terrosidad de la tierra cuidada con esmero. La propiedad tiene agua propia, 170 árboles frutales y un corral registrado. Hay una casa principal, que es un edificio tradicional con tres dormitorios y un baño, y cuatro apartamentos completos. Una atractiva zona de piscina con césped y tumbonas ofrece un entorno ideal para el descanso y la relajación. Además del terreno existente, existe la posibilidad de comprar la parcela vecina de 8.000m². La construcción existente puede ampliarse en un 15%, lo que también convierte la compra en una inversión inteligente.